El Parque Nacional Yasuní es un parque nacional
ecuatoriano que se extiende sobre un área de 9820 kilómetros cuadrados
en las provincias de Pastaza, de Napo y Orellana entre el río Napo y el
río Curaray en plena cuenca amazónica a unos 250 kilómetros al sureste
de Quito. El parque, fundamentalmente selvático, fue designado por la
UNESCO en 1989 como una reserva de la biosfera y es parte del
territorio donde se encuentra ubicado el pueblo Huaorani. Dos facciones
huao, los tagaeri y taromenane, son grupos no contactados.
El PNY está situado en áreas de las subcuencas de los ríos
Tiputini, Yasuní, Nashiño, Cononaco y Curaray, tributarios del río
Napo, quien a la vez desemboca en el Amazonas. El Parque tiene forma de
herradura y comprende desde la zona sur del Río Napo y norte del Río
Curaray, extendiéndose por la cuenca media del Río Tivacuno[1] Según un reciente estudio[2]
el Parque Nacional Yasuní y la zona ampliada subyacente se consideran
la zona más biodiversa del planeta por su riqueza en anfibios, aves,
mamíferos y plantas. Este parque cuenta con mas especies de animales
por hectarea que toda Europa junta.
El término Yasuni, sin conocer su origen lingüístico, significa
“tierra sagrada” como es interpretado de manera general por comunidades
de la zona.
Cabe resaltar que la zona amazónica ecuatoriana es rica en
yacimientos de petróleo y que la economía petrolera es el pilar sobre
el que se sotiene la economía del Estado ecuatoriano desde la década de
1970. Ante esto, en el año 1998 el gobierno de Jamil Mahuad declaró la
zona sur de PNY zona intangible, para proteger a los pueblos no
contactados y preservar la reserva de la biosfera lejos de los campos
petroleros. Desde el año 2007 alrededor del PNY se ha formulado una
propuesta denominada Iniciativa ITT para mantener el crudo bajo tierra
aplicando un tipo de compensación económica internacional, la que no ha
podido concretarse.